Estos viajes tienen como denominador común una experiencia combinada de descubrimiento gastronómico, vino y cultura, todo ello acompañado generalmente por algunas caminatas agradables y sencillas. Visitamos tanto bodegas famosas como otras menos conocidas, degustamos comidas en fantásticos restaurantes o bares de tapas y os ofrecemos una visión y comprensión de primera mano de la cultura local. Todos los viajes son muy flexibles en términos de poder adaptarlos a vuestras necesidades y perfiles de cliente.